Segunda sesión del curso Evaluación en Competencias básicas

En la segunda sesión del curso sobre Evaluación de las Competencias Básicas ayer tuvimos la oportunidad de escuchar a Jacobo Calvo (maestro y orientador) y a Pilar Vázquez y José Luis Ortega (miembros del Proyecto Azahara).

En su intervención, Jacobo expuso cómo percibe él la evaluación como un elemento más de la programación, en concreto, la evaluación está ligada a la metodología, siendo un elemento transversal de cada uno de los elementos de la programación. 

Por este motivo la evaluación no es el elemento final sino un proceso en el que se tienen en cuenta no sólo los resultados sino el mismo proceso.

Desde esta visión metodológica de la evaluación, cada unidad didáctica debe combinar tipos de actividades (reproductivas, de conexión y de reflexión), actividades de expresión oral y escrita, al menos dos recursos de búsqueda de información, trabajo individual y trabajo grupal. 

Hay que generar contextos y situaciones ricas y variadas para desarrollar la adquisición de competencias y para que dispongamos de suficiente información para evaluar.

 

 

Éstos serán los referentes a la hora de evaluar, los indicadores de evaluación para analizar los resultados de los procesos. Si esos resultados no son los deseables, habrá que reajustar los procesos.

Asignando una calificación a estos indicadores, asociamos la calificación misma al grado de consecución de las competencias básicas través de herramientas de observación, hojas de registro, plantillas que recoge en el siguiente documento:

 

                                                            Herramientas para la evaluación. Jacobo Calvo

 

Aquí podéis consultar su presentación sobre Evaluación de CCBB

 

José Luis Ortega y Pilar Vázquez expusieron la propuesta para la evaluación de Competencias del Proyecto Azahara. Este Proyecto realiza una propuesta estratégica para el desarrollo y la evaluación de las competencias básicas con carácter integrado, tanto para Educación Primaria como para Educación Secundaria Obligatoria.
Propone como premisas de trabajo el propio marco normativo para hacer operativas las competencias básicas en las herramientas de planificación y de desarrollo de la práctica docente y en la toma de decisiones sobre la evaluación y la promoción del alumnado. Plantea la conveniencia de que los centros educativos completen y concreten la contribución de las áreas/materias al desarrollo de las competencias básicas para responder a la realidad educativa del centro y a las necesidades del alumnado. 

Su propuesta práctica para la evaluación de las CCBB parte pues del marco normativo y formula a qué nivel de logro ha de llegar el alumnado en cada uno de los ciclos (Primaria) y cursos (Secundaria). 

Estos indicadores de logro han de modularse en la realidad y contexto de los centros, por ello los equipos docentes de los centros educativos deben elaborar un documento consensuado que indique a qué nivel de logro de cada competencia ha de llegar su alumnado en cada ciclo/curso. 

El proyecto Azahara no estima los criterios de evaluación en sí mismos como la clave para evaluar competencias sino los indicadores de logro, sustentados, eso sí, en los criterios de evaluación y descriptores de etapa. 

De esta forma, dice el proyecto Azahara, la competencias se evalúan de una manera colegiada si la evaluación se basa en indicadores de logro comunes en todas las áreas. Su planteamiento no precisa ni estima pertinente el valor numérico o porcentajes de contribución de cada área/materia al desarrollo de cada competencia, sino indicadores de logro consensuados. De todo ello dan habida cuenta en su publicación "Competencias Básicas: Desarrollo y Evaluación"